El arte de convertir los PROPÓSITOS en OBJETIVOS
Lucila Andrés Díez
El pasar de una etapa a otra en la vida (“año nuevo vida nueva”), siempre nos incita a pensar en propósitos, el cambio nos estimula para querer mejorar y cambiar.
Por ejemplo: Curso nuevo, casa nueva, pareja nueva, trabajo nuevo, etc.
Pero sobre todo: AÑO NUEVO.
Solemos empezar el año nuevo con un “brindis al sol”: una lista de propósitos, la mayoría de las veces repetidos, nos copiamos a nosotros mismos con gran impunidad y alegría.
Se oyen los propósitos mas variados y para gusto de los más exigentes: “Quiero dejar de fumar, este año voy a ahorrar, voy a leer más, quiero ser más ordenada /ordenado, haré limpieza en mis apuntes, quiero hacer amigos, etc., etc., etc.”.