Depende del caso y del tipo de problema, del tipo de terapia (individual o grupal) y del momento de la terapia.
La frecuencia es variable. Pueden ser una vez a la semana o una vez cada quince días o incluso una vez al mes en periodos de seguimiento. La duración en terapias individuales suele ser entre tres cuartos y una hora, a veces en terapia de pareja o familia son más largas.