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en respuesta a: Violencia filio-parental #1918
Aunque no se mucho a nivel teórico de este tema, me voy a animar a dar mi visión del mismo, desde la óptica clínica.
Yo creo que es cierto que los rasgos de personalidad son muy importantes a la hora de llevar a cabo cualquier conducta violenta, también dentro del hogar, y por supuesto en la llamada violencia ascendente. Ahora bien, no debemos olvidar que esos rasgos de personalidad se configuran, partiendo del temperamento base de cada niño, a través de todas las experiencias que va viviendo a lo largo de su infancia. Y aquí creo que es necesario abrir la mirada a lo que ocurre de puertas de la casa hacia afuera, y es que, en mi opinión, el modelado de la conducta violenta no se da sólo de padres a hijos, si no que hemos de considerar la violencia en el ámbito escolar, y en la sociedad en general, como factores claves en su instauración.
en respuesta a: ¿Psicología se escribe con P de "Perfecto"? #1856Pues para ser tu primer psicodebate has dado en una diana muy importante!
Yo creo que sí es bastante frecuente que los terapeutas seamos bastante perfeccionistas y exigentes con la manera en la que trabajamos nuestros casos, y que esta manera de abordar nuestra práctica clínica se mantiene en el tiempo, por un proceso de reforzamiento negativo bastante potente. Siendo esta una característica positiva, es también cierto que «en el medio está la virtud» y, si no lo regulamos bien, se puede volver en nuestra contra. En mi caso, lo que más me cuesta gestionar son los pequeños o grandes «fracasos» terapéuticos, ya que tiendo a explicarlos a través de un estilo atribucional interno, y esta atribución no siempre es correcta o exclusiva.
En este sentido soy una firme defensora del trabajo en equipo y la supervisión de casos, que nos ayuda por un lado, en caso de que tengamos dudas o lagunas de conocimiento, pero por otro lado, no menos importante, nos centra en el objetivo y ajusta nuestra conducta a un nivel más funcional.Parándome a pensar en tu pregunta sobre si se generaliza a otras áreas de mi vida, creo que es un rasgo de personalidad que está presente en todas ellas, pero probablemente con menos intensidad que en el ámbito laboral.
PD: yo me voy a exponer a no releer el texto antes de publicarlo 😉
en respuesta a: Nuestra práctica: el tormento y el éxtasis #1827¡Hola a todos/as! Esa frase nos encaja, ya que todos los que hemos podido tener ya experiencia (en mayor o menor medida) en la práctica profesional identificamos perfectamente ambas situaciones: situaciones de tormento que van desde esos obstáculos que existen para llegar a comprender la historia del paciente, a dificultades a la hora de que realice ciertas tareas o simplemente, que cancele sesiones, ¿qué habrá ocurrido? Y, por otro lado, el éxtasis indiscutible cuando la persona muestra una mejoría, cuando hay compromiso y ganas de seguir trabajando.
No es fácil ser psicólogo, ya que lleva asociado un nivel de carga emocional importante, pero al mismo tiempo es un aprendizaje continuo tanto personal como profesional, yo creo que nos enriquecemos de cada formación, de cada libro, de cada compañero y de cada persona que pasa por consulta.Termino con un fragmento de «Carta a un futuro psicólogo clínico» que creo que viene a definir lo que todos los que nos dedicamos a esta profesión estamos sintiendo o hemos sentido alguna vez:
«Aprenderás que en el juego de la psicoterapia es la propia persona quien hace los goles: tú solo darás los pases. Primero buscarás recetas mágicas, hasta que la experiencia alivie tus ansiedades y entiendas que cada persona es un mundo.
Partirás con la camiseta de una teoría puesta y será el tiempo el que te ayude a cambiar dogma por flexibilidad , sin perder el rigor del oficio. Al principio serás demasiado serio, acaso para maquillar tus inseguridades.Gradualmente irás transformando solemnidad por creatividad y juego. Y sentirás alegría, pena, rabia, miedo, sorpresa, curiosidad, nostalgia y satisfacción. Sobre todo, colega, serás un afortunado: bienvenido a un hermoso trabajo».en respuesta a: Los celos: persiguiéndonos desde la infancia. #1801Eva, creo que has dado en una diana muy importante. Muchas veces los adultos estamos pendientes de si nuestro hijo, nieto, sobrino… presenta celos de su hermano recien nacido, y actuamos ante las conductas que lo puedan indicar, a veces de manera más acertada y otras veces menos. Pero no podemos olvidar que los celos son una emoción, y como tal, normal y adaptativa, nos está avisando de algo, excepto si se descompensa en intensidad, duración y/o frecuencia.
Decía que has dado en una diana muy importante en mi opinión, y es la de que los celos no son algo exclusivo de los niños hacia sus hermanos pequeños ni de las parejas entre si, que de alguna manera son los celos que más acostumbrados estamos a ver y analizar. También, sin salirnos del entorno familiar, se dan celos del hermano pequeño hacia el mayor porque puede hacer cosas que él aún no puede, del padre/madre hacia sus hijos por la atención que reciben, de los niños hacia la nueva pareja de sus progenitores, de la nueva pareja de los progenitores hacia los hijos de estos… La manera en la que los gestionemos va a ser el modelo en el que se van a fijar para actuar los más pequeños de la casa.
Gracias Cris por iniciar este debate y hacernos reflexionar sobre ello.
en respuesta a: Los celos: persiguiéndonos desde la infancia. #1792Me parece un tema muy interesante e importante de tratar, y que a veces no recibe la suficiente relevancia hasta que nos encontramos con un problema así.
Efectivamente los niños desde muy pequeñitos tienen sentimientos y conductas de celos y envidia, muchas veces por la llegada de algún nuevo miembro, como puede ser el nacimiento de un hermano, como bien comentabas. Al principio puede ser una conducta normal, sin una importancia excesiva, aunque igualmente es importante saberlo manejar. El problema está cuando esto se mantiene en el tiempo y aprenden a relacionarse con los demás, o con aquello que no tienen pero que si está presente en otras personas, desde este malestar y resentimiento, que a su vez genera inseguridad. Se puede observar en los niños un cambio de actitud y comportamiento, por ejemplo, enfados persistentes a veces sin justificación ninguna, lloros, conductas disruptivas y oposicionistas hacia objetos o hacia los demás, ya sea el nuevo miembro o los propios padres, retrocesos evolutivos como una actitud y lenguaje más infantil o hacerse pis o caca y muestran alteraciones respecto a la comida o al sueño, principalmente.
Esto puede estar influido por el propio temperamento y/o la propia educación o estilo educativo de los padres. Creo que es importante validar la emoción pero sin mostrar más interés del que corresponde, es decir, no reforzar y ceder ante las conductas de celos, pues hace que se mantenga y además obtenga ganancias secundarias. Tampoco hacer como si nada, ya que es un mensaje importante y nos quiere decir algo, al igual que aceptar de manera incondicional los celos, y dejar que forme parte de su forma de relacionarse, así como que aprenda que es normal compararse con los demás, sentir envidia constantemente y maldecir a los otros por lo que tienen o han conseguido.
En este caso seria importante ir preparando al niño sobre el nuevo miembro, mostrarle los privilegios de tener un hermano y de ser el mayor, hacerle partícipe junto a los padres de algunos cuidados (sin dejarle el peso a él), ya que así lo verá como una persona a la que ayudar y no por la que competir, retirar la atención a las conductas celosas, con las que buscan la llamada de atención y reforzar y atenderle las positivas y deseadas, no comparar con los hermanos ni manifestar más aprecio o preferencia por alguno de ellos, no cuantificar el afecto, potenciar las habilidades y capacidades positivas de cada uno, dedicar tiempo en común mostrando el valor de la cooperación y dedicar tiempo a cada uno por separado, pero siempre por igual. No nos olvidemos que también son conductas que pueden aprender de sus padres.
Esto es importante ya sea de cara a un hermano o a una nueva pareja de los padres.
Por otro lado,los padres también pueden tener celos de los hijos, bien porque sea algo que han aprendido desde pequeños o han tenido situaciones difíciles, o bien por la inseguridad y la envidia por el éxito o las cosas que hacen bien los hijos y que ellos no pudieron conseguir. A veces desde el parto, los padres pueden ser desplazados por el sentimiento de protección y atención de la madre respecto a los hijos, el olvido o refuerzo a los momentos de pareja (aunque al principio es normal), con las pérdidas de reforzadores correspondientes. En otras ocasiones son obligados a ser padres a la fuerza, y no tienen ese sentimiento, siendo una molestia el hijo más que una satisfacción. Quizá seria necesario trabajar aspectos personales y creencias del padre, así como potenciar su autoestima, y en los casos en los que se quiera mejorar la relación con los hijos y con la pareja, pautas y formas de actuación y acercamiento.Hola! la verdad que el tema que propones es muy importante tenerlo en cuenta y más ahora que como bien dices con el tema de las redes sociales.
Actualmente, parece que si no publicas todo lo que haces o no tienes muchos amigos en las redes, parece que no haces nada y que estas «aislado».
Las personas, debido a nuestra sociedad, siempre están en contacto con gente, ya sea por motivos de trabajo, por ir a comprar algo, por que vengan a arreglar algo a la casa… Pero hay personas que pueden hacer perfectamente esto, pero luego les gusta hacer actividades en solitario o incluso solamente con una persona. Como bien dices, hay que tener cuidado para pensar que puede ser una dificultad a la hora de relacionarse o que es su estilo de personalidad. En este caso se debería más al estilo personal, ya que se relaciona bien con su medio y no lo evita.Contestando a la pregunta del debate, creo que no necesitamos ser supersociales para estar bien psicológicamente, creo que eso depende más de las cosas que hacemos y de cómo nos sentimos cuando nos relacionamos. Además, creo que es muy importante tenerlo en cuenta, sobre todo con los niños o adolescentes, ya que muchas veces los padres se pueden alarmar de que no salen o no tienen muchos amigos y habría que saber si es debido a un problema de socialización o no.
Por último y a raíz de este debate, yo me preguntaría si las personas que les gusta aislarse o vivir en el campo sin nadie alrededor, según nuestra sociedad tendrían algún problema pero, ¿realmente es así?
en respuesta a: Trastorno de Personalidad Límite #1717Como dice Lucila, la sociedad de hoy a menudo facilita el desarrollo de conductas límite.
Pero también es cierto que, a veces y aunque cueste creerlo,promueve salud, y los psicólogos debemos utilizarlo ya que ése también es nuestro objetivo.
Hoy en día el mundo ofrece tantas opciones y posibilidades que, aunque generalmente son fuente de incertidumbre y frustración, también permiten:
-Poder elegir, en la medida de lo posible, lo que uno quiera ser. Es decir, tener objetivos. Es decir, poder centrarse en la tarea como estrategia de autoregulación, desbloqueándonos en la acción.
(guiño a la frase de centrarse en la tarea que tantas veces hemos escuchado los alumnos en Luria)
-Beneficiarse también de la tendencia de reconectar con los valores, y que éstos sean una base fuerte de nuestros objetivos.
-Aprovechar que está de moda el culto a la autosuperación, tanto mental como física (tener un trabajo y hobbies que te motiven y te llenen, cuidar la alimentación, hacer ejercicio, estar en contacto con la naturaleza…).
-Servirse de la oferta de información para labrarse un yo fuerte y para conocer las experiencias de otras personas así como sus propias estrategias.en respuesta a: Los adolescentes y sus hobbies #1704Estoy de acuerdo con las chicas en que es un tema muy interesante y aplicable 😉
Por un lado yo creo que es interesante tener en cuenta que el medio de nuestros adolescentes hoy es el medio digital, y que socializan y tienen mucho ocio a través de él. Lo importante es lograr un equilibrio, que el medio digital no se convierta en exclusivo no implica prohibirlo ni tratar de eliminarlo. Transmitírselo así a nuestros adolescentes me parece importante.
Por otro lado, yo creo que tenemos que acercarnos también a este ámbito teniendo en cuenta que las TIC al final son también un medio para acercarnos a información. Por ejemplo, un adolescente se pasa el tiempo viendo videos de youtube, pero ¿qué tipos de videos ve? ¿sobre coches? ¿sobre cómo maquillarse mejor? ¿videos de gente haciendo deporte? ¿monólogos?… El contenido de ello en muchas ocasiones nos puede dar un índicio de cuáles son los intereses de la persona. Y teniendo esa información podemos buscar acercarnos a esos intereses sin utilizar una pantalla para ello.
Otro recurso para la exploración que yo utilizo bastante es el menú de actividades reforzantes que plantea Francisco Xavier Mendez en su libro «El niño que no sonríe». ¿Lo conocéis?en respuesta a: Los adolescentes y sus hobbies #1702¡Hola! Creo que es un tema de gran actualidad y que cada vez cobra más importancia.
Una forma de hacer frente a refuerzos tan potentes como Whatsapp, Instagram o Snapchat es, en primer lugar, conocer todos estos avances tecnológicos que están suponiendo un cambio social. Esto significa que, en muchas ocasiones va a ser necesario hablar de reggaetón y youtubers, conocer cuáles son los intereses del chico/a en cuestión e intentar irnos a “su mundo”, más allá de juzgar, intentar ver de qué forma se pueden utilizar estos avances de forma beneficiosa. Y por supuesto, siempre se van a poder buscar otras fuentes de reforzadores: cosas que hacían y que ya no hacen y/o cosas que les gustaría hacer, tienen la oportunidad de descubrir y explorar delante de ellos.Mireya Martín Manzano
en respuesta a: Los adolescentes y sus hobbies #1697Hola! La verdad que lo que planteas es un reto a la hora de encontrar actividades gratificantes que no sea estar con el ordenador, movil, tablet… pero igualmente creo que la mayoría van a actividades extraescolares (aunque muchos estarán más relacionados con las actividades académicas) y nos puede dar una información de lo que le gusta o no.
También se puede preguntar que hacían cuando eran más pequeños o que les gustaba, ya que muchas actividades se dejan por exigencias académicas. Por otro lado, siempre se puede intentar decir actividades y que vayan diciendo que les ha gustado o no para ir teniendo una pequeña idea.Creo que no sería un error el buscar otros «oficios» fuera del mundo cibernético ya que el recibir muchos me gustas en una foto al final puede ser que poco a poco se habitúen a ello ya que si siempre son las mismas personas las que le dan a me gusta, esto puede hacer que la persona al saber quien dará a me gusta pierda ese refuerzo que tenia al principio (aunque no todo). Mientras que otras actividades tiene un refuerzo distinto, la dificultad es encontrar esas actividades y que los padres estén de acuerdo ya que hay veces que por motivos económicos o porque ven más importante que vaya a inglés o a refuerzo de otras asignaturas.
en respuesta a: Drogas y la sociedad del bienestar #1675Vaya aportaciones más intenresantes chicas!
Estoy de acuerdo en todo lo que proponéis, el efecto «sociedad de la felicidad» hace que por un lado queramos estar contentos a toda costa y deshacernos de los estados desagradables rápidamente, cuanto más rápido mejor de hecho, aunque para ello haya que recurrir a métodos artificiales.
En mi opinión hay otro factor más que se une a ellos, y es que cada vez queremos obtener las recompensas con menos esfuerzo, ¿qué pensáis? ¿puede estar influyendo esta cultura del «sin esfuerzo» en las adicciones?en respuesta a: Drogas y la sociedad del bienestar #1639¡Hola! Sí, yo también creo que es algo que está influyendo en el consumo. Al final, como sabemos, a nivel biológico habría un circuito de actuación común a todas las drogas ya sean químicas o conductuales, el famoso “circuito de la recompensa o del placer” incrementando la probabilidad de repetir esa conducta para obtener refuerzo. Por lo tanto, es fácil y barato en tiempo usar una droga para conseguir placer, el problema está en tener esto como único recurso. Es decir, y en la línea del comentario de Marta, son dos caras de una misma moneda: hay gente que consume porque busca estados agradables, nuevas sensaciones y/o efectos “positivos”, como por ejemplo quien busca la desinhibición al tomar alcohol. Mientras que por otro lado, el consumo puede tener función de evitar un malestar, que siguiendo lo que comentaba Loida de la “dictadura de la felicidad” tiene sentido, porque parece que en la cultura del siglo XXI hay que ser y estar feliz por imperativo, como si se nos negara el derecho a estar tristes.
en respuesta a: Adolescentes y TICs #1640¡Hola a tod@s!
Antes de nada decir que estoy totalmente de acuerdo con todo lo que habéis dicho. Actualmente desde que los niños nacen están en contacto con las tecnologías, tanto que muchas veces los más pequeños intentan pasar las páginas de un libro como se hace en una tablet. Por eso, como decís lo más adecuado seria hacer programas de prevención o en las tutorias de los colegios dedicar algunas horas a estos temas.
Es verdad que existe el cyberacoso (entre otros), pero el problema creo que no es la tecnología porque por desgracia en las aulas siempre han existido conflictos y si se prohibieran no se acabaría con dicho problema (aunque estaríamos hablando de otro tema).
Actualmente creo que no hay programas de prevención para las aulas, pero la policía si tiene el servicio de ir alguna hora a los colegios a explicar los riesgos que hay y como prevenirlos.
En el caso de los padres, profesores y educadores a través de red.es si ha existido algún curso gratuito sobre la seguridad en las TIC, el problema que no todo el mundo se entera de la existencia de estos cursos y que no todo el mundo «dispone de ese tiempo».En definitiva, como ya bien habéis dicho es un gran reto que creo que aun queda mucho por mejorar.
en respuesta a: Adolescentes y TICs #1596Qué interesante debate, que muchas veces tenemos en nuestras consultas tanto con los padres como con los chavales, e incluso con algunos profesores.
Evidentemente que las TIC´s son un riesgo para todos (también para los adultos), y no podemos negar realidades como el ciberacoso o las adicciones a los dispositivos electrónicos. Sin embargo, no creo que la solución a estos problemas sea su prohibición. La conducta es la interacción de la persona con su ambiente, y en el siglo XXI ese ambiente implica las TIC´s. En mi humilde opinión la solución pasa por una buena educación en beneficios y riesgos, en estrategias de utilización eficaz, en habilidades de comunicación y asertividad para hacer frente a las dificultades que conllevan… Pero esta solución requiere de tiempo y esfuerzo por parte de todos: padres, profesores, educadores, psicólogos… ¿Estamos dispuestos a ello?¿Estáis de acuerdo conmigo?
en respuesta a: La importancia de los mediadores en la vida adulta #1572¡Qué interesantes aportaciones Marta y Mireya!
Estoy de acuerdo con vosotras, dado que la conducta se explica como la interacción de la persona con su ambiente, y que siempre está sujeta a las leyes de aprendizaje, se hace también necesario trabajar con los mediadores del entorno del paciente adulto.
Sin embargo, al contrario de lo que ocurre en el caso de los niños, con los adultos es infrecuente que vengan acompañados a la consulta. ¿Por qué creéis que pasa esto? ¿Consideraríais importante que se cambiara? ¿Cómo podríamos conseguirlo? -
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